Los hemisferios cerebrales
Los dos hemisferios cerebrales tienen funciones diferentes. Todos tenemos una amplia experiencia con el hemisferio izquierdo del cerebro, ya que es el lado que se utiliza de forma habitual mientras estamos funcionando en la vida cotidiana.
La mayoría de las personas viven la vida casi exclusivamente a través del lado izquierdo del cerebro, en el pensamiento, el razonamiento y la parte lógica.
Del lado derecho, la mayoría tienen muy poca experiencia, muchas ni siquiera son conscientes de que los dos hemisferios del cerebro tienen funciones distintas.
El cerebro izquierdo es analítico, lógico, ordena nuestras vidas por temas y procura mantenerlo todo en orden para nosotros. El cerebro izquierdo está siempre en alerta para mantenernos a salvo y asegurar nuestra supervivencia. Es responsable del lenguaje, los números, rutinas, hábitos, los aspectos prácticos, hechos, estrategias y todos los detalles de nuestra vida. Toma decisiones basadas en lo que ha aprendido en el pasado y juzga todo como correcto o incorrecto, bueno o malo.
El lado derecho es el de la creatividad y las sensaciones, está conectado con el cosmos y nuestra capacidad intuitiva de saber. Ve la foto en conjunto en lugar de los detalles; es feliz, agradecido, emocional, intuitivo e imaginativo. Utiliza símbolos e imágenes en lugar de palabras y lenguaje como hace el izquierdo.
El hemisferio derecho del cerebro tiene que ver con el aquí y el ahora; y no tiene preocupaciones.
El escenario ideal es tener los dos hemisferios del cerebro funcionando en la misma medida, siendo cada lado igualmente importante, y en equilibrio con el otro.
Un Baño de Sonido debidamente ejecutado, tiene la capacidad de apagar nuestro lado izquierdo del cerebro y colocarnos en un estado de meditación de forma automática, permitiendo surgir al cerebro derecho y conectar con la paz y el bienestar que lo caracteriza.
En este estado de ondas cerebrales theta, en el que el tiempo y el espacio no tienen significado, podemos experimentar la unidad con todo lo que es, y un profundo conocimiento de nuestra verdadera identidad como conciencia infinita confinada temporalmente en un cuerpo humano. Es una experiencia potente que puede provocar cambios en la vida de algunas personas.
El silenciamiento de la charla habitual del cerebro izquierdo es también un componente esencial en un proceso de sanación. Cuando asistimos a un Baño de Sonido experimentamos la quietud y la paz del hemisferio derecho del cerebro, dando un descanso al izquierdo, y es entonces cuando se activa el mecanismo de autosanación natural de nuestro cuerpo.
Nos conviene recuperar el hemisferio derecho y que éste pueda funcionar en paralelo con el izquierdo. Ir hacia la sincronización hemisférica de los dos lados de nuestro cerebro de modo que podamos llevar una vida más equilibrada y desarrollar todas nuestras capacidades.
Para los que practicamos con estos instrumentos, y también para quienes asisten a las sesiones de sonido con regularidad, esta reconexión se hace cada vez más fácil. Es como que los sonidos armónicos abren la puerta a la conciencia infinita del lado derecho del cerebro, y ésta permanece abierta o por lo menos desbloqueada, permitiéndonos volver allí en la próxima ocasión de forma más fácil y posteriormente en cualquier momento que se desee.